Tras un fuerte operativo policial en la zona minera, la Policía capturó a un individuo que estaría involucrado en el asesinato del policía Leonardo Walter Flores Mamani (52), quien recibió un impacto de bala en la cabeza en un enfrentamiento a balazos con los delincuentes, ocurrido en el centro poblado Lunar de Oro, durante la madrugada del sábado 30 de julio. El sujeto de dudosa reputación fue identicicado como Abdías Gamarra Soplin (49), natural de Lima, el mismo que, en abril del 2018 fue capturado por pertenecer a la banda delincuencial “Los Injertos de Manchay”.
La captura se dio en circunstancias que los efectivos de la Comisaría La Rinconada de la División Policial (Divpol) eslizaban operativos.
Al intervenir la cantina “Las Ñustas” atraparon al “injerto” Abdías Gamarra, quien junto a su acompañante Adner Paucar Sáenz (43), natural de Satipo, tomaban en actitud sospechosa. Tras el registro personal la Policía encontró en poder de Abdías una pistola abastecida con quince cartuchos sin percutir, la que tenía en la espalda sujetada a la correa de su pantalón. Ambos fueron llevados a la Comisaría.
Según el sistema policial, Gamarra Soplín tiene antecedentes por las denuncias de receptación, hurto y robo agravado a mano armada. Asimismo, en el 2018 cayó junto a otros 15 sujetos integrantes de la agrupación delictiva ‘Los injertos de Manchay’, dedicada al hurto y robo de vehículos (Lima); ellos también manejaban armamentos que también se les incautó. El individuo permanece en la Comisaría para continuar con las investigaciones. De igual manera informaron que intensicicarán las intervenciones.
Con respecto al fallecimiento del valiente Policía Leonardo Walter Flores Mamani, natural de Cusco, la Institución Policial la noche del domingo le rindió un homenaje póstumo, en el que también participó la familia de la víctima que protagonizó desgarradoras escenas de dolor. El homenaje se realizó en el Complejo Policial de la salida a Puno, en donde sus colegas de la Divpol Juliaca, al mando del coronel PNP Alberto Rojas Méndez, le dieron el último adiós, pues sus restos fueron trasladados a Cusco en donde fue sepultado.
El Policía que dio su vida por luchar contra la delincuencia, falleció la madrugada del sábado tras recibir un balazo en la cabeza cuando se enfrentó cara a cara a los delincuentes en una balacera en Cerro Lunar de Oro; quisieron auxiliarlo, pero la herida fue mortal.
