Una vez más los estudiantes de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA) de Puno tomaron las instalaciones del campus universitario. En esta ocasión, exigen la implementación de sus laboratorios, además de la solución de otros aspectos.
Se intentó entrevistar al rector de esta casa superior de estudios, Porfirio Enriquez Salas; sin embargo, mediante la oficina de Imagen Institucional, se nos informó que la autoridad universitaria está imposibilitada de brindar declaraciones a los medios de comunicación.
No obstante, otras autoridades universitarias aseguraron que ya suman 9 las tomas de local en lo que va del año, y que la mayoría de estas tendrían fines políticos; entre otras cosas, precisaron, se solicita la vacancia del rector.
El vicerrector académico de la UNA, Rogelio Flores Franco, reveló que se tiene en consideración aplazar una semana el avance académico, a fin de recuperar las labores pérdidas por las tomas de local.
Asimismo, refirió que la falta de comunicación y diálogo entre las autoridades y los estudiantes provocan las tomas de local, que son una medida no aprobada para el petitorio de necesidades.
Para él, en muchos casos el pliego de reclamos no justifica el cierre de la universidad, ya que las pérdidas no solo son académicas, sino también económicas. “Se pierde un aproximado de 200 mil soles por cada toma de local”, acotó.
