Desde el último jueves, las operaciones de la mina Antapaccay, ubicada en la provincia de Espinar, se encuentran paralizadas. La población de una de las comunidades de la zona de influencia, Alto Huarca se ha levantado en protesta por el incumplimiento de promesas que –señalan- la empresa mantiene con ellos.

Los habitantes de esta comunidad originaria tomaron la decisión de adoptar esta medida luego de una reunión. Se trasladaron hasta uno de los tajos y piden la presencia del gerente general de Glencore Antapaccay, Carlos Cotera.

En este punto, los manifestantes indicaron estar cansados de los engaños y actitudes dilatorias de la empresa para atender a sus reclamos por el problema socio ambiental que –afirman- generaron las operaciones mineras y, asimismo, el incumplimiento de otras promesas.

Flavio Huanqque, coordinador de las comunidades que integran la Asamblea Multicomunal, señaló que la empresa es la responsable que el diálogo entre Antapaccay y Alto Huarca se haya roto y que ahora estén divididos. Exigen la presencia de Cotera para que ahora participe como interlocutor.

Otras comunidades integrantes de la Asamblea Multicomunal no se han sumado a la medida. Estarían evaluando la situación a fin de decidir se suman a la protesta.

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